En el mundo del espectáculo, pocas amistades han brillado tanto como la de Selena Gomez y Taylor Swift. Lo que comenzó como un encuentro casual hace más de 16 años, en 2008, se convirtió en una hermandad inquebrantable que ha resistido el paso del tiempo, los desafíos mediáticos y las presiones de la fama.
Esta relación nació de una coincidencia: ambas cantantes salieron con los hermanos Jonas, Selena con Nick y Taylor con Joe, en un momento en que sus carreras comenzaban a despuntar en el círculo de la música pop juvenil y el universo Disney.
Selena, con tan solo 15 años, y Taylor, de 18, se cruzaron en un ambiente de noviazgos adolescentes y fama emergente. “Todo era lindo, éramos jóvenes”, recordó Selena en el pódcast Therapuss con Jake Shane, destacando que esas relaciones fugaces con los Jonas fueron el punto de partida de su conexión. A pesar de que los romances terminaron, la afinidad entre ambas creció, alimentada por la complicidad de compartir experiencias de rupturas amorosas y los altibajos de la adolescencia bajo los reflectores.
El primer encuentro público de esta amistad ocurrió en 2008, durante el estreno de Another Cinderella Story, donde las cámaras captaron por primera vez su química. Desde entonces, su vínculo se hizo visible en alfombras rojas, como los People’s Choice Awards y los Teen Choice Awards, y en momentos icónicos, como cuando Selena se unió a Taylor en el 1989 Tour de 2015, un espectáculo que Gomez describió como “inolvidable”. Uno de los recuerdos más especiales de Selena es cuando Taylor le compartió en privado, en un cuarto de hotel, su canción inédita Love Story, que dejó a Gomez maravillada por su belleza.
A lo largo de los años, su relación se fortaleció con gestos de apoyo incondicional. Selena destacó en una entrevista con Seventeen en 2009 que Taylor siempre había pasado por los mismos problemas amorosos antes que ella, convirtiéndose en una consejera clave. Por su parte, Taylor defendió a Selena en momentos de crisis, como durante el enfrentamiento mediático con Kanye West en 2016.
Las redes sociales también se convirtieron en un reflejo de su cercanía, con publicaciones que muestran desde bailes improvisados hasta dedicatorias emotivas, como el mensaje de Selena por el cumpleaños 25 de Taylor: “Feliz de conocerte y de conocer tus diarios”.
La amistad también se nutrió de pequeños rituales privados, como cuando Taylor le regaló a Selena y su prometido Benny Blanco un pan artesanal en julio de 2025, haciendo un guiño a una de sus canciones. Además, Taylor celebró con entusiasmo el compromiso de Selena, ofreciéndose como “dama de las flores” para su boda, un comentario que desató revuelo en redes. Fotos de cumpleaños con globos metálicos y cenas íntimas han sido una constante en sus redes, mostrando una conexión que trasciende la fama.
Selena Gomez y Taylor Swift han demostrado que su amistad, nacida de un fracaso amoroso adolescente, es un raro ejemplo de lealtad en el mundo del pop. A través de los años, han celebrado juntas éxitos musicales, superado crisis personales y compartido momentos que han inspirado a millones, consolidando una de las relaciones más auténticas y admiradas de Hollywood.
