El ministro de Infraestructura y Transporte, Roberto Luque, anunció la reactivación del tramo ferroviario Alausí – Nariz del Diablo, considerado una de las joyas turísticas y patrimoniales del Ecuador. La decisión busca rescatar un trayecto histórico que en años anteriores fue abandonado bajo el argumento de que no era “sostenible a largo plazo”.
“Lamentablemente gobiernos anteriores, con el pretexto de que el proyecto no era sostenible a largo plazo, dejaron morir lo que es un patrimonio histórico”, señaló Luque al confirmar la medida.
El ferrocarril, inaugurado a inicios del siglo XX durante el gobierno de Eloy Alfaro, es una de las obras de ingeniería más emblemáticas del país. El tramo Alausí – Nariz del Diablo, en particular, se convirtió en un atractivo turístico internacional gracias a su compleja construcción en zigzag, diseñada para sortear la cordillera andina en uno de sus puntos más escarpados.
Durante décadas, el recorrido fue uno de los principales imanes de visitantes nacionales y extranjeros, quienes viajaban a Alausí, en Chimborazo, para experimentar el trayecto. Sin embargo, el servicio quedó suspendido en 2020, en medio de la pandemia de COVID-19 y de la crisis financiera de la Empresa de Ferrocarriles del Ecuador, lo que significó un duro golpe para la economía local.
Con la reactivación, el Gobierno espera impulsar el turismo en la Sierra central y revalorizar el ferrocarril como símbolo cultural y patrimonial. Autoridades locales y operadores turísticos de la zona consideran que esta medida permitirá dinamizar nuevamente la economía de Alausí y sus alrededores, donde hoteles, restaurantes y emprendimientos vivieron años de auge gracias al paso del tren.