La violencia digital contra adolescentes y mujeres se ha convertido en una alarmante realidad en Ecuador, con un incremento de casos de extorsión, chantaje y difusión de contenido íntimo sin consentimiento. Según estudios del Ministerio de Educación y organizaciones como ChildFund, cuatro de cada diez adolescentes han enfrentado riesgos en línea, como ciberacoso y grooming. La mayoría de las víctimas de violencia digital son mujeres y niñas, quienes sufren un impacto devastador en su salud mental, reputación y seguridad.
El problema se ha agravado debido a la falta de protocolos de protección adecuados y la impunidad, ya que en muchos casos las autoridades no catalogan estas acciones como delitos. Además, la prevalencia del uso de teléfonos móviles y redes sociales entre los jóvenes ha expuesto a esta población a riesgos cada vez mayores. La situación ha generado un llamado urgente a las instituciones para que refuercen los mecanismos de prevención y sanción, y eduquen a la ciudadanía sobre los peligros del entorno digital.