Corea del Norte ha prohibido el uso de palabras de origen occidental en su sector turístico, como parte de un programa de formación lingüística. El Partido de los Trabajadores instruyó a los guías del balneario de Wonsan a reemplazar términos como “hamburguesa”, “helado” y “karaoke” por vocablos locales, con el fin de reforzar la identidad cultural frente a la influencia de Corea del Sur y Occidente.
Según The Sun, entre 20 y 30 guías turísticos están participando en un curso donde se les enseña a usar equivalentes oficiales. La palabra “hamburguesa” ahora debe llamarse dajin-gogi gyeoppang (“pan doble con carne molida”), mientras que “helado” se sustituye por eseukimo (“esquimal”) y “karaoke” por “máquina de acompañamiento en pantalla”. Los instructores enfatizan la importancia de pensar y hablar en clave norcoreana, evitando cualquier préstamo lingüístico extranjero.
Al finalizar el curso, los aspirantes a guías son evaluados con un examen práctico. Aquellos que no dominen los nuevos términos y los usen de forma natural no podrán continuar con su trabajo en el sector turístico. Esta medida demuestra el control del régimen sobre las interacciones con los visitantes extranjeros.