El Gobierno del presidente Daniel Noboa, representantes de gremios productivos y del transporte pesado llegaron a un acuerdo clave en la tarde del 15 de septiembre de 2025: la creación de mesas de diálogo. El objetivo de estas mesas será evaluar el impacto del incremento del precio del galón de diésel en la transportación, una medida que, según el sector exportador, es necesaria. La reunión tuvo lugar en la Gobernación de Latacunga, sede temporal del Ejecutivo, con la presencia de los ministros de Infraestructura y Transporte, Gobierno y Producción, junto a líderes empresariales de sectores como el bananero y el acuícola.
Richard Salazar, director de Acorbanec, afirmó que el sector exportador apoya la eliminación del subsidio al diésel y está dispuesto a asumir el posible aumento en el costo del transporte de sus productos. Explicó que las mesas de diálogo permitirán un análisis técnico para determinar el impacto del alza, que va de $1,80 a $2,80 por galón. Por su parte, Juan Carlos Navarro, presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano, manifestó su apoyo a la decisión de Noboa, señalando que son “enemigos de los subsidios” y que confían en que el mercado se autorregule. Navarro resaltó el optimismo de la reunión y la disposición de los transportistas a no realizar paralizaciones.
Mientras tanto, de manera simultánea, el viceministro de Servicios del Transporte, Byron Franco, se reunió con autoridades y representantes del transporte urbano de la Sierra Centro para presentar el programa de incentivos productivos del Gobierno. Con estas iniciativas, el Ejecutivo busca gestionar la eliminación del subsidio al diésel de manera consensuada y evitar conflictos que puedan afectar la producción y la economía del país. El diálogo abierto y la disposición de los diferentes sectores marcan un paso importante en la implementación de esta medida económica.