El régimen de Nicolás Maduro ha ordenado una serie de ejercicios militares en la isla de La Orchila, en un claro mensaje a la administración de Donald Trump. La medida se produce en medio de una escalada de tensiones, provocada por el despliegue de ocho buques de guerra de EE. UU. en el mar Caribe. El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, aseguró que su país se está preparando para una defensa integral de la nación y que se ha llamado a “duplicar los esfuerzos” en un escenario que ha calificado como “bélico”.
En los ejercicios militares, que se están llevando a cabo en La Orchila, se han utilizado drones de vigilancia y armados, vehículos anfibios y artillería de fabricación rusa. Las autoridades venezolanas han denunciado la presencia de los buques estadounidenses como una “amenaza” y un “acoso”, mientras que Washington asegura que su misión es combatir el narcotráfico. Padrino López ha afirmado que el despliegue militar de EE. UU. es parte de una “voz vulgar y amenazante” contra Venezuela, pero que el país está preparado para responder.