El paro nacional convocado por movimientos y organizaciones indígenas ha provocado fuertes enfrentamientos en la Panamericana Norte. En la vía Cusubamba-Cayambe, manifestantes han bloqueado la autopista en ambos sentidos con llantas quemadas, escombros y palos, lo que ha generado una confrontación con la fuerza pública. La policía y los militares han utilizado gas lacrimógeno y carros especializados, mientras que los protestantes han respondido con piedras y objetos contundentes.
La Panamericana Norte (E35) se mantiene cerrada y bajo custodia de la policía y las Fuerzas Armadas, que buscan habilitar el paso para el transporte público y comercial. En redes sociales se ha verificado que la vía Guachalá-Cayambe también ha sido tomada por manifestantes que queman llantas. La Conaie ha denunciado en su cuenta de X la represión policial contra las comunidades en el sector de Cajas, donde también se han registrado enfrentamientos. En la comunidad de Pijal, más de diez personas derribaron un árbol gigante para impedir el flujo vehicular, lo que ha agudizado la situación en la zona.