El alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, se pronunció enérgicamente este miércoles, 8 de octubre, pocas horas después de que se realizaran allanamientos a inmuebles presuntamente vinculados a su círculo cercano, como parte de una investigación por lavado de activos. La Fiscalía informó que la indagación se dirige contra seis personas naturales y cinco jurídicas, con operativos en Guayaquil y Samborondón. En su cuenta de X, Alvarez minimizó la acción judicial, asegurando que “Nada va a empañar la fiesta de mañana en Guayaquil” y afirmó que no le dará la atención a lo que considera una distracción: “Quieren volumen para distraer todos sus problemas; no se los voy a dar. Aquí seguimos parados y seguiremos parados”.
El alcalde fue más allá y lanzó una crítica directa al Gobierno, insinuando una persecución política programada: “Ya todos saben cómo actuar. Este Gobierno, siempre jodiendo antes de las fiestas de Guayaquil”. Esta declaración sugiere una intención de sabotear los eventos conmemorativos de la ciudad. A pesar de la controversia, Alvarez buscó reafirmar su compromiso con su gestión, citando que “se seguirá trabajando” y anunciando la entrega de una nueva flota vehicular municipal para las 10:30 de este mismo miércoles.
Alvarez concluyó su mensaje con una fuerte crítica a las prioridades del Ejecutivo. El alcalde contrastó la acción legal en su contra con la ola de violencia que vive el país. “Mientras en Ecuador matan comuneros, matan artesanos, nos matamos entre hermanos en las calles, ellos persiguen”, puntualizó. Con esta afirmación, el Alcalde desvía la atención de la investigación de lavado de activos y la enfoca en los problemas de inseguridad, buscando posicionar el operativo como una maniobra distractora en lugar de una acción de justicia.
