Nicolás Maduro ironizó el 9 de octubre sobre los barcos de guerra estadounidenses en el Caribe, atribuyendo la escasez de sardinas a su “frío imperial”, durante la inauguración del Congreso Mundial en Defensa de la Madre Tierra en Caracas, con representantes de 60 países.
Maduro cuestionó el negacionismo climático de “supremacistas” como Trump, quien califica el cambio climático de fraude. Afirmó que buscan una “dictadura global sobre escombros”, preguntando si tienen “otro planeta” y bromeando sobre pasajes caros, mientras su ministra Gabriela Ramírez citó un aumento de 1,5°C en temperaturas marinas afectando la temporada de sardinas.
Venezuela convocó una reunión de emergencia en el Consejo de Seguridad de la ONU el 10 de octubre por el despliegue de ocho barcos, un submarino nuclear y aviones de EE.UU. desde agosto, justificado como lucha antinarcotráfico. Maduro llamó a recuperar el planeta con una sociedad respetuosa.