La cuenta regresiva para el primer concierto de Shakira en Ecuador ha llegado a su fin y Quito ya se encuentra inmerso en la “Shakifobia”. La jornada previa al show de este sábado 8 de noviembre estuvo marcada por un ferviente y caótico proceso de canje de entradas en el Estadio Olímpico Atahualpa, lo que puso a prueba la paciencia de cientos de “shakináticos”. Los seguidores de la artista colombiana, muchos de los cuales viajaron desde otras provincias del país, se congregaron en largas filas bajo un sol inclemente en la calle Manuel Sánchez para asegurar su boleto.
La alta demanda de canje no solo disparó la venta de paraguas y bebidas por parte de los vendedores ambulantes en los alrededores del estadio, sino que también generó momentos de tensión. A mediodía, se reportaron altercados y disputas entre personas que intentaban ingresar a la fuerza o guardar puestos para terceros, lo que en un incidente obligó a la intervención de la Policía Nacional para resolver el conflicto. El tour de Shakira, Las Mujeres Ya No Lloran World Tour, con tres fechas programadas en la capital (8, 9 y 11 de noviembre), es también un evento económico: la visita de los fans, que han viajado hasta ocho horas y planean quedarse entre cuatro y siete días, ha llenado la capacidad hotelera de la capital, inyectando un notable impulso al sector turístico de Quito.








