La jornada electoral del domingo impulsó un operativo de limpieza ampliado en Guayaquil, con el objetivo de mantener limpios y transitables los exteriores de los recintos electorales. Alrededor de 900 obreros y 50 vehículos, incluyendo recolectores y volquetes, trabajaron de forma continua en los puntos de mayor afluencia, bajo la supervisión de la Dirección de Aseo Cantonal del Municipio.
El despliegue superó la respuesta de un domingo regular, que cuenta con aproximadamente 600 obreros, debido al movimiento masivo de electores. El volumen de desechos generado fue superior al habitual, estimándose la retirada de entre 1 y 2,5 toneladas de residuos por cada unidad educativa habilitada como recinto. Las cuadrillas cubrieron sectores estratégicos, incluyendo zonas de alta concurrencia como la Universidad de Guayaquil.











