El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente chino, Xi Jinping, mantuvieron una conversación telefónica para abordar temas clave como el comercio, Taiwán y la guerra en Ucrania. La llamada, confirmada por la Casa Blanca y funcionarios chinos, tuvo lugar días después de que la primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, sugiriera que el ejército de Japón podría intervenir si China tomaba medidas contra Taiwán, la isla autogobernada que Beijing reclama como territorio propio. Durante el diálogo, Xi Jinping le recordó a Trump que el retorno de Taiwán a la China continental es una “parte importante del orden internacional de posguerra”. El líder chino también enfatizó la necesidad de que ambos países, que lucharon juntos durante la Segunda Guerra Mundial, “salvaguarden conjuntamente el resultado victorioso” de ese conflicto, según la agencia de noticias oficial Xinhua.
El presidente Xi instó a Estados Unidos a “mantener el impulso en las relaciones” bilaterales, haciendo referencia a la reunión que ambos líderes sostuvieron el mes pasado en Corea del Sur para intentar aliviar la guerra comercial que ha afectado a las dos principales economías del mundo. La disputa comercial entre Washington y Beijing, que abarca desde aranceles portuarios hasta productos como la soja, ha generado volatilidad en los mercados y ha interrumpido las cadenas de suministro globales. Aunque discutieron sobre comercio, la declaración china no ofreció detalles sobre acuerdos concretos, como la compra de soja estadounidense. La conversación se produce en un momento de crecientes tensiones geopolíticas, con líderes europeos y africanos reuniéndose para abordar la guerra en Ucrania y la ausencia de Estados Unidos en la reciente cumbre del G20 en Sudáfrica.








