El conflicto entre el Gobierno central y el Municipio de Guayaquil por el manejo del proyecto aeroportuario se ha intensificado. Este miércoles, 3 de diciembre, el alcalde Aquiles Alvarez denunció públicamente los intentos del Ministerio de Infraestructura y Transporte (MIT) de “debilitar” a la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil (AAG) y bloquear los recursos para el nuevo aeropuerto en Daular.
Alvarez reveló en su enlace radial que el MIT ha enviado tres comunicaciones oficiales que buscan paralizar el manejo del fideicomiso que administra los fondos, cuya cifra asciende a más de $357 millones ($345,6 millones en el fideicomiso y $10 millones en cuentas de la AAG).
Intentos de Bloqueo y Amenaza de Disolución
El alcalde afirmó que el director jurídico del MIT ha firmado oficios en los que se instruye a la fiduciaria a:
- “No ejecutar ninguna instrucción” emitida por la Autoridad Aeroportuaria.
- No mover “ni un centavo” de los recursos que custodian los fondos municipales.
“En el último oficio ya se amenaza con liquidar y disolver la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil,” afirmó Alvarez, señalando que esto equivale a “poner un candado” sobre los recursos de la ciudad.
El alcalde subrayó que el fideicomiso, alimentado por el canon de la concesión del aeropuerto actual, superará los $400 millones en enero, cuando Tagsa entregue $35 millones adicionales.
Defensa de las Competencias y Acusaciones
Alvarez vinculó estos intentos de bloqueo con la promoción de la alternativa de construir un aeropuerto en Taura. Insistió en que la competencia aeroportuaria de Guayaquil está blindada, amparada en la concesión vigente desde la administración de Gustavo Noboa y ratificada por un reciente pronunciamiento del Procurador del Estado.
“No voy a permitir que digan que estamos desesperados por hacer el nuevo aeropuerto. Aquí lo que estamos haciendo es cuidar los fondos de la ciudad,” enfatizó.
El alcalde advirtió que una eventual intervención estatal perjudicaría directamente a los ciudadanos, resultando en la pérdida de obras, servicios y la planificación del nuevo aeropuerto. Finalizó asegurando que Guayaquil continuará con su hoja de ruta en Daular y que los recursos del fideicomiso, que además financian obras en Chongón y la vía a la costa, son “sagrados para Guayaquil”.








