Un incendio forestal de grandes proporciones consumió aproximadamente 45 hectáreas de vegetación seca en los alrededores del Bosque Protector Prosperina, al noroeste de Guayaquil. La emergencia, que inició durante la tarde, movilizó a más de un centenar de bomberos y decenas de unidades de combate para controlar el avance del fuego hacia zonas residenciales cercanas. Las condiciones climáticas, marcadas por fuertes ráfagas de viento y altas temperaturas, dificultaron las tareas de sofocación, obligando a los equipos de rescate a trabajar durante varias horas para cercar los focos activos y prevenir la reactivación de las llamas en el área protegida.
La Secretaría de Gestión de Riesgos informó que no se registraron víctimas humanas ni daños estructurales en las viviendas colindantes, aunque el impacto ambiental en el ecosistema local es considerable. Los peritos de la institución iniciaron las investigaciones pertinentes para determinar si el origen del siniestro fue provocado por actividades humanas o por causas naturales vinculadas a la sequía extrema que afecta a la región litoral. Las autoridades locales mantienen un monitoreo constante en la zona afectada y recomiendan a la ciudadanía evitar la quema de desechos en espacios abiertos para reducir el riesgo de nuevos incidentes que pongan en peligro la biodiversidad urbana.








