Una severa tormenta invernal ha cubierto de nieve gran parte del noreste de Estados Unidos, afectando la movilidad y seguridad de millones de ciudadanos en estados como Nueva York, Nueva Jersey y Pensilvania. Las autoridades meteorológicas han emitido alertas por ráfagas de viento gélido y acumulación de nieve que en algunas zonas supera los treinta centímetros, lo que ha derivado en condiciones peligrosas para la conducción y el cierre de importantes autopistas. En los aeropuertos de la región, se han reportado miles de cancelaciones de vuelos, complicando los planes de viaje de quienes regresan de las festividades navideñas en medio de una visibilidad casi nula en las pistas.

El gobernador de Nueva York ha declarado el estado de emergencia en varios condados para agilizar el despliegue de maquinaria de limpieza y equipos de rescate en las vías principales. Además de las afectaciones en el transporte, se han registrado cortes en el suministro eléctrico debido a la caída de ramas y tendido afectado por el peso del hielo acumulado. Se recomienda a la población permanecer en sus hogares y evitar desplazamientos innecesarios mientras los equipos de emergencia trabajan para restablecer la normalidad en las áreas más críticas. Los pronósticos indican que las bajas temperaturas persistirán durante las próximas horas, manteniendo el riesgo de formación de capas de hielo sobre el pavimento.









