La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) de Venezuela informó este lunes sobre la destrucción de una aeronave bimotor en el estado Apure, zona fronteriza con Colombia. El comandante estratégico operacional, Domingo Hernández Lárez, detalló que el avión fue localizado en tierra, oculto bajo tácticas de “enmascaramiento” junto a un terraplén que funcionaba como pista clandestina. Al no contar con seriales visibles, planes de vuelo ni permisos correspondientes, la unidad fue declarada hostil y destruida en el sitio por los efectivos militares.
Según el balance ofrecido por las autoridades, con esta intervención ya suman 31 las aeronaves inmovilizadas en lo que va de 2025, y un total de 422 desde que se promulgó la ley de defensa del espacio aéreo en el año 2012. Este operativo se suma a una reciente intercepción ocurrida el pasado 5 de diciembre, donde se utilizaron sistemas de caza F-16 para neutralizar otro vuelo ilegal que ingresó al espacio aéreo venezolano con el transpondedor apagado y sin emitir códigos de identificación.
Estas acciones militares ocurren en un contexto de alta sensibilidad regional, marcado por el despliegue aeronaval de Estados Unidos en el Caribe con el objetivo declarado de combatir el narcotráfico. Sin embargo, el Gobierno de Caracas interpreta estos movimientos como una amenaza directa a su soberanía. Las tensiones en la zona han escalado tras los anuncios de bloqueos a petroleros sancionados y la reciente confiscación de buques que transportaban crudo venezolano, lo que mantiene en alerta a los órganos de defensa del país suramericano.








