La salud de Bruce Willis, ícono de Hollywood conocido por películas como Die Hard y El sexto sentido, sigue siendo motivo de preocupación tras su diagnóstico de demencia frontotemporal (DFT) en 2023, que lo llevó a retirarse de la actuación en 2022. En una reciente entrevista con Fox News Digital y en su libro Emma and Bruce Willis: The Unexpected Journey, su esposa, Emma Heming Willis, compartió detalles conmovedores sobre los primeros indicios de la enfermedad, destacando un accidente durante el rodaje de Die Hard (1988) que podría haber marcado un punto de inflexión.
Según Heming, Willis sufrió una severa pérdida auditiva tras grabar una escena en Die Hard donde disparaba debajo de una mesa sin protección auditiva adecuada. “Eso le quitó gran parte de la audición. Con el tiempo, todos empezamos a notar que no escuchaba bien. Al principio creí que era eso, que simplemente estaba envejeciendo”, relató. Esta lesión, inicialmente atribuida al incidente, fue considerada por la familia como una secuela de su carrera en Hollywood, incluso bromeando: “¡Habla más fuerte! ¡Die Hard le arruinó los oídos a papá!”, según recordó su hija Tallulah en una entrevista con Vogue en 2023.
Sin embargo, con los años, otros síntomas alarmantes surgieron. Heming describe en su libro cómo notó cambios sutiles pero persistentes en el comportamiento de Willis: desconexión en reuniones familiares, dificultad para mantener conversaciones fluidas y el regreso de una tartamudez que había controlado desde niño. “Todo se sentía extraño. Nuestra relación ya no era la misma, nuestras charlas no fluían como antes”, escribió. Estos signos, inicialmente confundidos con el envejecimiento o las secuelas del accidente, resultaron ser indicios tempranos de DFT, una forma rara de demencia que afecta principalmente a personas jóvenes.
Tras el diagnóstico inicial de afasia en 2022, seguido por la confirmación de DFT, la familia enfrentó decisiones difíciles. Heming reveló que Willis fue trasladado a un hogar de cuidados especializados con atención médica las 24 horas, una elección que calificó como “una de las decisiones más difíciles” pero necesaria para el bienestar de sus hijas, Mabel (13) y Evelyn (11), y en línea con lo que Willis hubiera querido. “Sabía que Bruce habría querido eso para nuestras hijas por encima de cualquier cosa”, afirmó en una entrevista con ABC News.
A través de su libro y apariciones públicas, Heming busca concienciar sobre la DFT y la importancia de detectar sus primeros síntomas, a menudo malinterpretados. Su testimonio refleja el impacto emocional de cuidar a un ser querido con una enfermedad neurodegenerativa y su compromiso con mantener la conexión afectiva con Willis, a pesar de los desafíos.
