La inteligencia artificial (IA) está transformando las operaciones de Amazon, y su CEO, Andy Jassy, adelantó en una carta pública que su uso generalizado podría reducir la plantilla de la empresa, que actualmente supera los 1,5 millones de empleados en todo el mundo. La IA, presente en casi todos los sectores de Amazon, “cambiará la forma en que trabajamos”, afirmó.
Jassy señaló que algunas tareas requerirán menos personal, mientras otras demandarán nuevos roles. Aunque no detalló el impacto exacto, indicó que la IA generativa, utilizada en más de 1.000 servicios y aplicaciones de la empresa, optimizará procesos, reduciendo la fuerza laboral corporativa. Esta reestructuración, según Newsweek, podría influir en debates sobre automatización y capacitación laboral en EE. UU.
La tendencia de Amazon refleja un movimiento global hacia la automatización de tareas rutinarias con IA. Sin embargo, el consultor de recursos humanos Bryan Driscoll criticó la estrategia, calificándola como una “manipulación” para reemplazar trabajadores por máquinas más económicas, evitando salarios, beneficios y normativas laborales.
Driscoll advirtió que “decenas de miles” de empleados podrían perder sus empleos no por desempeño, sino por la eficiencia de la IA. La carta de Jassy, según el consultor, encubre un plan para priorizar la rentabilidad sobre el bienestar de los trabajadores, generando incertidumbre en la fuerza laboral.
El anuncio de Amazon intensifica el debate sobre el futuro del trabajo en un contexto donde la IA redefine roles laborales. Mientras la empresa busca ganancias de eficiencia, los efectos sociales de estas reducciones podrían generar tensiones, especialmente en un mercado laboral que enfrenta los desafíos de la automatización.