Durante la Asamblea de Socios de Barcelona Sporting Club, el presidente de la institución, Antonio Álvarez, generó polémica al afirmar que fue candidato político para “tener inmunidad y no ir preso”, alegando una supuesta persecución por parte del Presidente de la República.
La declaración causó sorpresa entre los asistentes y encendió el debate en redes sociales, donde se cuestiona el uso del escenario político con fines personales. Álvarez, hermano del alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, aseguró además que “el Gobierno persigue a todo el mundo” y que su participación en la política fue una forma de defenderse ante lo que calificó como “ataques sistemáticos”.
El dirigente deportivo se encuentra actualmente al frente de un club que atraviesa una de sus etapas más críticas en el plano deportivo y económico. Su intervención en la Asamblea se dio en medio de reclamos de los socios por los resultados y la situación administrativa del equipo.
Las reacciones no se hicieron esperar, y varios actores políticos y deportivos pidieron a la Fiscalía analizar las declaraciones del dirigente, al considerarlas una admisión grave sobre el uso del poder político para evitar procesos judiciales.