El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, ícono del fútbol mundial, fue declarado nulo el 29 de mayo de 2025 por el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro, Argentina, tras la recusación de la jueza Julieta Makintach. La magistrada fue apartada por participar en un documental no autorizado sobre el caso, comprometiendo su imparcialidad. El proceso, iniciado el 11 de marzo, investigaba a siete profesionales de la salud por presunto homicidio con dolo en la muerte de Maradona, ocurrida el 25 de noviembre de 2020 por un edema pulmonar.
La nulidad, decretada por los jueces Maximiliano Savarino y Verónica Di Tomasso, implica reiniciar el juicio desde cero, lo que podría demorar meses al requerir un nuevo tribunal. Makintach fue recusada tras pruebas que incluían el guion y tráiler de una miniserie, titulada tentativamente “La jueza de Dios”, donde aparecía en escenas personales y en los tribunales, violando la prohibición de grabar audiencias. Esta conducta fue considerada una falta grave a la objetividad, afectando a las partes acusadoras y defensas.
El proceso, que llevaba 21 audiencias y más de 40 testigos, incluidas las hijas de Maradona, Dalma, Gianinna y Jana, buscaba determinar si la atención médica domiciliaria tras una operación neurológica fue negligente. Los acusados, entre ellos la psiquiatra Agustina Cosachov y el neurocirujano Leopoldo Luque, enfrentan penas de 8 a 25 años por homicidio simple. La familia de Maradona expresó frustración, con el abogado Fernando Burlando criticando el “destrato” judicial y la “desidia” en el caso.
La anulación ha generado indignación entre los seguidores del astro y críticas al sistema judicial argentino. La investigación sobre Makintach, ahora bajo escrutinio por posible juicio político, continúa, mientras la justicia debe sortear un nuevo tribunal. Este revés retrasa la resolución sobre la responsabilidad en la muerte de Maradona, dejando en vilo a su familia y al público que busca justicia para “El Diez”.
