Obtener la ciudadanía estadounidense es un proceso complejo que requiere cumplir estrictos requisitos legales, pero ciertos apellidos comunes en Estados Unidos podrían agilizar algunos trámites, según un artículo de El Universo. Apellidos como Smith, Johnson, García, Martínez, Rodríguez, Hernández y López, entre otros, están asociados con familias establecidas en el país, lo que puede facilitar la verificación de antecedentes y vínculos familiares durante el proceso de naturalización.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) exige residencia legal continua, dominio básico del inglés y conocimientos de historia y gobierno, pero un apellido con raíces históricas puede simplificar la validación de documentos, especialmente en casos de patrocinio familiar. Por ejemplo, apellidos latinos como García y Rodríguez, que figuran entre los más comunes según el censo de 2010, reflejan la creciente influencia hispana y pueden agilizar procesos al demostrar conexiones con ciudadanos estadounidenses.
Sin embargo, expertos aclaran que el apellido no garantiza la ciudadanía automática. Los solicitantes deben cumplir todos los requisitos, asistir a entrevistas y presentar documentación completa. Organizaciones como el Immigrant Legal Resource Center destacan que, aunque apellidos comunes ofrecen ventajas administrativas, la aprobación depende de un historial migratorio limpio y el cumplimiento de las normativas de USCIS. La lista de apellidos, que incluye también a Brown, Davis y Wilson, no exime de los procesos legales, pero puede ser un factor complementario en la entrevista de naturalización.