La nueva Cárcel del Encuentro ha sido designada por el Gobierno para recluir a los presos más peligrosos del país, incluidos exfuncionarios y líderes criminales. Este centro penitenciario, que sustituye a La Roca como prisión de máxima seguridad, opera con un sistema estricto de control.
El ministro del Interior, John Reimberg, informó que cada celda está diseñada para albergar a cuatro reos y cuenta con sistemas de bloqueo para todo tipo de comunicaciones, eliminando las señales de celular. El manejo de la prisión está a cargo del Bloque de Seguridad. La meta del Gobierno es dotar a la cárcel con personal nuevo, capacitado y preparado, distinto al del SNAI, que ha presentado fallas en el control de otros centros penitenciarios. Se buscará seleccionar personal pasivo de las Fuerzas Armadas y la Policía para esta tarea.








