Bill Gates se pronunció sobre el controvertido plan de la geoingeniería solar, conocido popularmente como “apagar el sol”, una propuesta de varias startups que busca manipular artificialmente la radiación solar para enfriar el planeta. En una entrevista, el filántropo confirmó que ha financiado investigaciones para comprender la gestión de la radiación solar (SRM), un método que consiste en inyectar partículas reflectantes en la estratósfera para mitigar el ascenso de la temperatura global. Sin embargo, Gates dejó claro que financiar la investigación no es lo mismo que promover su uso.
El exdirector de Microsoft subrayó que solo llegaría a defender el despliegue de esta tecnología en un escenario de peligro climático extremo e incontrolable. Por ahora, asegura que el mundo está en camino de evitar los peores impactos del cambio climático gracias a la expansión de la energía limpia. No obstante, Gates advierte sobre dos grandes objeciones a la geoingeniería: la primera es el riesgo político de que confiar en esta solución debilite el impulso para reducir los combustibles fósiles, y la segunda, el vacío de conocimiento científico sobre cómo la inyección de partículas afectaría los patrones climáticos regionales, creando nuevos riesgos para comunidades vulnerables.








