Un brote de legionelosis en cinco zonas de Manhattan, Nueva York, ha causado 67 casos, 24 hospitalizaciones y 3 muertes desde el 25 de julio, según autoridades sanitarias. La bacteria Legionella, que provoca neumonía grave, se propaga por sistemas de aire acondicionado mal mantenidos, siendo este el brote más severo en la ciudad en una década.
La Legionella se transmite al inhalar agua contaminada en aerosol, sin contagio persona a persona. Los síntomas incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, dificultad para respirar, tos con mucosidad o sangre, dolor torácico y confusión, con un período de incubación de 2 a 14 días. El cambio climático, que favorece la proliferación en aguas estancadas, agrava el problema, según USA Today.
Las comunidades vulnerables, como Harlem, enfrentan mayor riesgo debido a infraestructura deficiente y enfermedades crónicas. Las autoridades han inspeccionado y tratado torres de enfriamiento, recomendando usar aire acondicionado con precaución, estar atentos a síntomas y buscar atención médica inmediata.
La ciudad trabaja en sistemas de control para prevenir futuros brotes, mientras se intensifican las medidas de contención en las zonas afectadas para proteger a la población.
