A pocos días de la instalación de la nueva Asamblea Nacional el 14 de mayo de 2025, los movimientos Acción Democrática Nacional (ADN) y Revolución Ciudadana (RC) intensifican negociaciones para definir la presidencia del Legislativo y la distribución de las 15 comisiones permanentes. Con 66 curules cada uno, según datos preliminares del Consejo Nacional Electoral, ambos bloques carecen de la mayoría absoluta de 77 votos, lo que los obliga a buscar alianzas con Pachakutik (9 asambleístas), Partido Social Cristiano (PSC, 4), Construye y fuerzas locales, clave para formar una mayoría legislativa.
ADN, liderado por el presidente Daniel Noboa, ha sumado apoyos del PSC y organizaciones provinciales, alcanzando cerca de 70 votos, según la asambleísta Nathalie Farinango. Anabella Azín, quien dirigirá la sesión inaugural, encabezó una reunión del bloque en Guayaquil el 23 de abril para consolidar estrategias. RC, por su parte, ratificó a Viviana Veloz como líder de su bancada de 66 legisladores tras la salida de Mónica Salazar, quien se declaró independiente por desacuerdos internos. RC insiste en un supuesto fraude electoral, reclamando inconsistencias en 1,875 actas, aunque mantiene diálogos con minorías.
La polarización entre ADN y RC, que dominarán el Legislativo, anticipa un período de intensas negociaciones. El PSC, con experiencia parlamentaria, apoyará al candidato de ADN para la presidencia, mientras Pachakutik y Construye, con posturas más independientes, serán decisivos. La elección de autoridades, el Consejo de Administración Legislativa y las comisiones definirá el rumbo político del país, en un contexto donde el Gobierno busca impulsar reformas económicas y de seguridad, y RC prioriza fiscalización y oposición.