La Cámara de Representantes de Estados Unidos, liderada por republicanos, aprobó el 21 de mayo de 2025 un proyecto de presupuesto impulsado por el presidente electo Donald Trump, que incluye recortes significativos al gasto público y medidas migratorias estrictas. La propuesta, que busca evitar un cierre del gobierno antes del 23 de mayo, destina $10 billones para financiar operaciones federales hasta marzo de 2026, pero elimina programas sociales clave y aumenta el presupuesto para seguridad fronteriza y deportaciones, generando críticas de demócratas y algunos republicanos moderados.
El plan, respaldado por figuras como Elon Musk, también eleva el techo de la deuda hasta 2027, un punto polémico que dividió a los legisladores. Aunque el proyecto pasó con 235 votos a favor y 174 en contra, enfrenta un futuro incierto en el Senado, donde demócratas y republicanos negocian ajustes para mitigar los recortes. La Casa Blanca y líderes demócratas advierten que las medidas podrían afectar servicios esenciales, mientras Trump insiste en que son necesarias para reducir el déficit y priorizar la seguridad nacional.
