China sorprendió al mundo con imágenes de su nuevo ekranoplano, apodado “Monstruo del Mar de Bohai”, una aeronave que vuela a solo 2 metros de altura aprovechando el efecto suelo, según La Vanguardia. Este vehículo, similar a un hovercraft, combina características de avión y embarcación.
El efecto suelo, un fenómeno aerodinámico, aumenta la sustentación y reduce la resistencia al volar cerca de la superficie, permitiendo operar con alta eficiencia energética sobre agua o terreno llano, destaca Computer Hoy. Es ideal para transportar carga o tropas rápidamente en escenarios como un posible conflicto en el Pacífico, incluyendo Taiwán.
El diseño del ekranoplano, con un casco tipo catamarán, cola en T y cuatro motores a reacción, está optimizado para misiones logísticas y de reabastecimiento en zonas litorales, según Naval News. Su baja altitud lo hace difícil de detectar por radares, otorgándole ventajas tácticas.
Aunque no es un avión de combate ni una nave futurista, su capacidad para transportar grandes cargas a alta velocidad lo convierte en un activo estratégico, especialmente para operaciones anfibias o de apoyo en el mar de China Meridional.
Las imágenes, difundidas en redes sociales chinas, han generado preocupación internacional, reavivando el interés por esta tecnología de origen soviético, que China parece haber perfeccionado para usos militares y logísticos.
