La Agencia Metropolitana de Control (AMC), junto con la Secretaría de Ambiente y la Policía Nacional, clausuró un matadero ilegal en Pintag, Quito, que operaba sin permisos y vertía desechos orgánicos en la quebrada Chacachupa, afectando la fauna acuática y generando riesgos para la salud pública por proliferación de bacterias.
El operativo, realizado el 15 de agosto de 2025, constató que el camal descargaba aguas residuales directamente al cauce, incumpliendo normas sanitarias y ambientales. Según el Código Municipal, estas infracciones pueden acarrear multas de hasta $7,050 (15 salarios básicos).
En 2024, ocho mataderos clandestinos fueron cerrados por insalubridad, y en 2025 ya suman cinco clausuras. Las autoridades refuerzan los controles para garantizar la higiene y proteger el ecosistema en el Distrito Metropolitano.