La comunidad internacional ha alzado su voz de forma unánime, haciendo un llamado urgente a la calma y a una desescalada de la tensión entre Israel e Irán. Desde el recrudecimiento de las hostilidades, organismos como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas han instado a ambas naciones a retomar la vía diplomática para resolver sus disputas.
Diversas figuras y entidades de alto nivel se han sumado a este llamado. El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, así como el exjefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, han apelado a la contención. El mensaje es claro: evitar una confrontación mayor en una región ya volátil y fomentar un diálogo constructivo que conduzca a la paz y la estabilidad.