El Senado de Brasil aprobó un proyecto de ley destinado a reducir las penas del expresidente Jair Bolsonaro y de otros condenados por la conspiración golpista tras los comicios de 2022. Con 48 votos a favor y 25 en contra, la iniciativa legislativa establece que no se acumulen las sanciones por los delitos de intento de abolición violenta del Estado democrático de derecho y de golpe de Estado. Al aplicarse únicamente la pena más grave, en este caso la de golpe de Estado, el exmandatario, sentenciado originalmente a 27 años de prisión, podría acceder a un régimen de progresión en poco más de dos años de reclusión.
La normativa también contempla reducciones significativas para quienes participaron en los disturbios del 8 de enero de 2023 en Brasilia como parte de una multitud. El texto ahora se dirige a la presidencia para su respectiva sanción, aunque Luiz Inácio Lula da Silva ya ha sugerido la posibilidad de un veto. En caso de que el mandatario bloquee la propuesta, el Congreso mantiene la facultad legal de anular dicho veto para ratificar la ley. Esta decisión ha generado un intenso debate sobre la firmeza de las sentencias previas dictadas por la Corte Suprema contra los líderes del movimiento golpista.
