La crisis institucional en Emelec se profundiza. A solo dos días del partido contra Delfín SC, el plantel principal decidió no entrenar este viernes en el Polideportivo de los Samanes, en Guayaquil, como medida de protesta por los sueldos atrasados. Los jugadores, que acumulan varios meses de retraso, realizaron únicamente un rondo simbólico y luego abandonaron las instalaciones, evidenciando su inconformidad con la dirigencia de Jorge Guzmán Mancilla.
La deuda salarial es una situación que se arrastra desde inicios de octubre. El capitán Luis Fernando León había revelado previamente que los valores pendientes oscilan entre los tres y ocho meses de retraso para la mayoría de los jugadores del primer equipo.
El desglose de la deuda interna muestra la gravedad del problema: 15 jugadores acumulan tres meses de retraso, mientras que dos jugadores arrastran una deuda de ocho meses. Emelec, actualmente semifinalista de la Copa Ecuador, atraviesa uno de sus peores momentos, con deudas, demandas de exjugadores y un creciente malestar interno.








