En una reciente entrevista con el L.A. Times, Dakota Johnson habló abiertamente sobre el fracaso en taquilla y crítica de Madame Web, la película de Marvel que protagonizó en 2024. La cinta, que forma parte del universo de Spider-Man, fue duramente criticada y galardonada con varios premios Razzie, incluyendo Peor Película, Peor Guion y Peor Actuación Femenina. Johnson, sin embargo, se mostró firme al desvincularse de la responsabilidad del descalabro, asegurando que “no fue mi culpa”.
La actriz explicó que el proyecto comenzó con una idea prometedora, pero terminó transformándose en algo completamente diferente debido a decisiones tomadas por ejecutivos poco creativos. “Hay una dinámica actual en la que muchas decisiones creativas se toman por comité o por personas que no tienen ni una pizca de creatividad”, afirmó Johnson, destacando las dificultades de producir arte bajo estas condiciones. Según ella, este enfoque dificulta crear una obra entretenida o significativa, lo que contribuyó al fracaso de la película.
Madame Web, dirigida por S.J. Clarkson, sigue la historia de Cassandra Webb, una paramédica de Manhattan que descubre poderes de clarividencia y fuerza sobrehumana tras un accidente. A pesar de contar con un elenco notable, que incluye a Sydney Sweeney, Isabela Merced y Celeste O’Connor, la película recaudó apenas 100 millones de dólares a nivel global frente a un presupuesto de 80 millones, siendo considerada uno de los mayores fracasos del universo de Spider-Man de Sony.
Johnson, quien recibió el Razzie a la Peor Actuación Femenina, se mostró indiferente ante las críticas, afirmando que no carga con el peso del fracaso. “He hecho toda clase de películas y algunas no les ha ido bien, ¿a quién le importa?”, comentó con una actitud despreocupada. La actriz también destacó que, a pesar de la experiencia, no se arrepiente de haber participado en el proyecto, aunque previamente había expresado que probablemente no volvería a trabajar en películas de superhéroes debido a la desconexión que sintió con este tipo de producciones.
Por otro lado, Emma Roberts, quien interpretó a Mary Parker en la cinta, defendió el filme y atribuyó parte de su mala recepción a la cultura de los memes en internet. En contraste, Johnson mantuvo su postura crítica hacia el proceso de producción, señalando que las decisiones basadas en números y algoritmos no favorecen la creación artística. Este caso pone en evidencia los desafíos que enfrentan las grandes producciones de Hollywood cuando las visiones creativas chocan con intereses comerciales.
