A través de un comunicado oficial emitido este martes veintitrés de diciembre, el Departamento de Justicia de Estados Unidos desestimó el contenido de nuevos archivos que vinculan al presidente Donald Trump con el entorno de Epstein, calificándolos como parte de una campaña de desprestigio.
📄 Puntos clave del pronunciamiento
El Departamento de Justicia, que actúa como la fiscalía federal del país, fue enfático en su postura a través de la red social X:
- Naturaleza de las acusaciones: Los documentos contienen afirmaciones que el organismo tildó de “falsas y sensacionalistas”.
- Origen temporal: Se reveló que esta información fue presentada ante el FBI en fechas cercanas a las elecciones de dos mil veinte, sugiriendo un móvil político detrás de los testimonios.
- Falta de pruebas: La institución subrayó que si dichas acusaciones tuvieran “un ápice de credibilidad”, ya habrían sido utilizadas legalmente contra Trump hace años.
🔍 Contexto de la desclasificación
Aunque el Departamento de Justicia no especificó a qué acusaciones exactas se refiere, la declaración surge en medio de una creciente expectativa pública por la revelación de nombres y testimonios relacionados con la red de tráfico sexual de Jeffrey Epstein.
La defensa del Ejecutivo sostiene que estas menciones son intentos reciclados de dañar la imagen presidencial, mientras que el Departamento de Justicia refuerza que, tras las investigaciones pertinentes, no se han hallado elementos que sustenten procesos judiciales derivados de estos archivos específicos presentados hace cinco años.








