Unidades de inteligencia de la Policía Nacional de Colombia han descubierto un plan de una disidencia de las FARC, liderada por alias Iván Mordisco, para asesinar al alcalde de Cali, Alejandro Eder, y a la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro. Los dos funcionarios fueron alertados sobre el complot, lo que llevó a reforzar sus esquemas de seguridad, así como los de los alcaldes de Bogotá y Medellín, que también enfrentan amenazas similares.
Este grupo disidente de las FARC ha sido responsable de la reciente ola de violencia que ha sacudido la región, incluyendo el ataque con carro bomba en Cali. El ministro de Defensa, general (r) Pedro Sánchez, anunció el inicio de la “Operación Sultana”, cuyo objetivo es desmantelar la estructura criminal que ha sembrado el terror en el Valle del Cauca.
