Estados Unidos ha firmado un contrato de 9.800 millones de dólares con la empresa Lockheed Martin para adquirir más de 1.900 misiles Patriot. El acuerdo, que abarca el período fiscal de 2024 a 2026, permitirá a las Fuerzas Armadas estadounidenses y sus aliados fortalecer sus defensas aéreas ante posibles ataques terrestres y aéreos. El contrato incluye 1.970 misiles del tipo PAC-3 MSE, un sistema diseñado para interceptar amenazas como misiles balísticos, misiles de crucero, amenazas hipersónicas y aeronaves, utilizando la avanzada tecnología “hit-to-kill” (golpear para matar).
La tecnología “hit-to-kill” permite a los misiles PAC-3 interceptar y destruir objetivos a través del contacto directo, aplicando una energía cinética superior a la que se puede lograr con explosiones de fragmentación. Según Lockheed Martin, su sistema ha sido “probado en combate” y proporciona una capacidad “inigualable” para operar en un entorno complejo. El mayor general Frank Lozano, del Programa Ejecutivo de Misiles del Ejército de EE. UU., afirmó que esta adquisición es beneficiosa porque permite al Ejército obtener una mayor cantidad de misiles y agilizar la entrega para reabastecer su inventario.
La firma de este contrato subraya la prioridad de Estados Unidos en modernizar y fortalecer su capacidad de defensa aérea. La adquisición de estos misiles de precisión busca no solo proteger sus propias fronteras, sino también reforzar la seguridad de sus socios internacionales en un escenario geopolítico cada vez más volátil.
