Una explosión despertó a los vecinos del centro de Guayaquil a las 02:00 del 21 de mayo de 2025, cuando un artefacto detonó en el portón de una mueblería ubicada en las calles García Moreno y Cuenca. El estallido, que dañó la puerta enrollable del local, fue alertado por un guardia de seguridad a ECU911. La Policía acudió al sitio y encontró un panfleto con una amenaza de un supuesto grupo de delincuencia organizada (GDO), exigiendo $10,000 para evitar futuros ataques. No se reportaron heridos ni otras detonaciones en la zona, según el jefe del circuito Garay, Édgar Henríquez.
Este incidente se suma a una serie de ataques con explosivos en Guayaquil, donde la extorsión se ha convertido en una táctica recurrente de bandas delictivas. En el circuito Garay, la Policía implementa el plan Cero Extorsión, que incluye registros con códigos QR y patrullajes periódicos para mitigar estas amenazas. Sin embargo, la reincidencia de estos actos, como los registrados en Sauces y otras zonas de la ciudad, evidencia los desafíos para controlar la delincuencia organizada. Las autoridades iniciaron investigaciones con equipos especializados, analizando grabaciones de cámaras de seguridad para identificar a los responsables.