Durante una reciente sesión del Concejo Municipal de Santo Domingo de los Tsáchilas, estallaron graves denuncias contra el alcalde Wilson Erazo y funcionarios municipales por su supuesta participación en un esquema de tráfico de tierras, falsificación de documentos y adjudicación irregular de predios.
Las acusaciones apuntan a que un terreno de aproximadamente 12 hectáreas, legalmente registrado a nombre de varios ciudadanos, habría sido invadido y posteriormente adjudicado a terceros por la administración municipal, en medio de un proceso señalado como opaco y sin sustento legal.
Los afectados aseguran que sus derechos de propiedad fueron vulnerados, generando preocupación entre comunidades y sectores productivos de la provincia.
Durante la sesión, varios concejales expresaron posturas divididas. Algunos exigieron transparencia inmediata y la apertura de una investigación interna, mientras otros defendieron la legalidad de los procedimientos realizados por el cabildo. Este ambiente tenso reflejó un quiebre dentro del cuerpo edilicio ante la magnitud de las acusaciones.
Frente a los señalamientos, el alcalde Wilson Erazo ha manifestado su disposición a colaborar con las autoridades competentes y reiteró que, de comprobarse las irregularidades, se remitirá el caso a la Fiscalía General del Estado.
El presunto tráfico de tierras en Santo Domingo pone en el centro del debate la gestión de los recursos territoriales, el respeto al derecho de propiedad y la responsabilidad de los gobiernos locales frente a posibles actos de corrupción.
El caso continúa generando reacciones y se espera que las autoridades judiciales inicien investigaciones formales en los próximos días.
