Las Fuerzas Armadas de Ecuador confirmaron que sus equipos y unidades militares colaborarán con la Policía Nacional para la apertura de todas las vías del país, incluyendo la “toma” de la provincia de Imbabura, la más afectada por los bloqueos del paro indígena. Henry Delgado, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, aseguró que la planificación y las tropas están listas para “retomar la paz, libertad y seguridad al pueblo ecuatoriano”.
El jefe militar hizo un llamado a la reflexión, advirtiendo que no se permitirá que los ciudadanos de Otavalo y Cotacachi se “quieran imponer sobre los 18 millones de ecuatorianos”. Esta declaración sigue al anuncio del presidente Daniel Noboa, quien aseguró que las vías bloqueadas se despejarán entre este miércoles y jueves, e irá acompañado de un programa de reactivación económica de $50 millones para Imbabura, Pichincha y Carchi.
Imbabura ha permanecido sitiada por manifestantes durante un mes en rechazo a la eliminación del subsidio al diésel, un periodo que ha estado marcado por incidentes y afectaciones a convoys militares que transportan insumos básicos.