Ante el fracaso en la licitación para nuevas termoeléctricas, el Gobierno Nacional ha decidido buscar soluciones urgentes e inmediatas para evitar más cortes de energía en el país. Según confirmó la vocera presidencial, Carolina Jaramillo, ahora se analiza incorporar barcazas energéticas —plataformas flotantes de generación eléctrica— y activar centrales inactivas que podrían aportar hasta 149 megavatios (MW) al sistema.
“Estamos evaluando energía flotante como alternativa rápida, mientras avanzamos en soluciones estructurales. Las barcazas podrían operar en zonas costeras o cercanas a puertos fluviales, ofreciendo generación de respaldo en momentos críticos”, explicó Jaramillo este domingo 4 de agosto.
La medida responde a la necesidad de fortalecer la generación termoeléctrica, tras el colapso hídrico registrado en 2024 que dejó al país con embalses casi vacíos y obligó a implementar apagones programados en varias provincias. Aunque los embalses actualmente están al 100% —como se informó más temprano—, el Ejecutivo busca diversificar fuentes de generación y no depender exclusivamente de lo hídrico.
La licitación fallida para nuevas termoeléctricas, lanzada a inicios de año, no logró concretar contratos suficientes, debido a la falta de oferentes, altos costos y condiciones poco atractivas para la inversión privada.
En paralelo, el Gobierno también revisa proyectos existentes o en desuso, con el objetivo de reactivar aquellas centrales que, con mantenimiento o inversión mínima, podrían aportar hasta 149 MW al Sistema Nacional Interconectado (SNI).
Jaramillo señaló que estas decisiones forman parte de un plan integral para garantizar la seguridad energética, tanto en el corto como en el mediano plazo, mientras se avanza en reformas estructurales dentro del sector eléctrico y en nuevas inversiones a largo plazo.