El Gobierno Nacional, a través de la ministra de Gobierno, Zaida Rovira, descartó este martes cualquier intención de dialogar con el presidente de la Conaie, Marlon Vargas, para desactivar el paro que persiste en Imbabura. Rovira argumentó que Vargas no está liderando directamente las protestas en la provincia y que, desde el inicio, “cerró el diálogo”.
La ministra criticó que las demandas de los manifestantes se hayan desviado del subsidio al diésel a temas como el rechazo a la consulta popular y la explotación petrolera, lo que, a su juicio, evidencia que el paro está siendo utilizado como “herramienta para hacer su plataforma política”. Rovira acusó a Vargas, junto con otros líderes como Leonidas Iza y Guillermo Churuchumbi, de buscar “desestabilizar y ganar réditos políticos”.
Rovira reiteró que el Gobierno agotó los espacios de diálogo con las organizaciones de Imbabura, pero que estas “solo quieren ganar tiempo” y no cumplieron su compromiso de levantar los bloqueos viales la semana pasada. Ante esto, la ministra anunció que las fuerzas del orden actuarán “con firmeza” en las próximas horas para reabrir las carreteras, garantizar los servicios y lograr que la provincia “se reactive”.