El Gobierno Nacional anunció la creación de un fondo de compensación superior a los 50 millones de dólares destinado a atender las pérdidas materiales y económicas ocasionadas durante el reciente paro en la provincia de Imbabura.
La medida busca apoyar a las familias afectadas, especialmente a los jóvenes que perdieron sus motocicletas, productores agrícolas con cosechas dañadas y emprendedores cuyos negocios fueron saqueados o destruidos.
De acuerdo con fuentes oficiales, el plan incluirá créditos preferenciales, bonos de recuperación y programas de reactivación económica para los sectores más golpeados por la violencia y la paralización. “Este fondo no solo es una compensación, sino una inversión en la estabilidad y la esperanza de miles de ecuatorianos que quieren volver a trabajar en paz”, señaló un vocero gubernamental.
El anuncio también fue interpretado como una respuesta política firme frente a los grupos que promovieron el caos durante las protestas. Las autoridades aseguran que, además de la ayuda económica, se fortalecerá la presencia del Estado en la provincia con obras de infraestructura y proyectos sociales que permitan reconstruir el tejido productivo y ciudadano.