Ciudad de México, México. Un hecho insólito ha permitido a las autoridades de León, Guanajuato, asestar un duro golpe al crimen organizado: la fuga de un hombre secuestrado llevó al descubrimiento y desmantelamiento de trece centros de operación criminal en la región. La operación, iniciada en abril debido a la proliferación de actividades ilícitas como el narcomenudeo y los robos, tuvo un giro inesperado.
Fue la valentía del hombre secuestrado, quien logró escapar de sus captores y buscar ayuda policial, lo que condujo a la localización de un centro neurálgico delictivo en el cruce de las calles Belisario Domínguez y Torreón. A partir de este punto, las fuerzas del orden lograron incautar drogas y dinero, además de detener a dos individuos vinculados con estas redes. La intervención también permitió la remoción de aproximadamente cien cámaras de vigilancia instaladas ilegalmente y la gestión de vendedores ambulantes, algunos de los cuales eran utilizados para la venta de mercancía robada y estupefacientes. A pesar de los importantes avances, las autoridades reconocen que los grupos criminales se están reubicando para evadir la captura, lo que exige un esfuerzo constante para mantener la seguridad en la zona.