El anuncio se dio en Ambato mientras el presidente Daniel Noboa realizaba actividades programadas en la ciudad. El presidente del MIT, Fausto Chango, declaró que han “tomado la resolución de que Tungurahua se va a activar al paro nacional, a la resistencia”. Por su parte, Jaime Pacha, presidente del MITA, acusó al gobierno de intentar “crear división” entre los indígenas con la entrega de los bonos Raíces, que según él no benefician a quienes más lo necesitan.
A pesar de que no todas las agrupaciones indígenas de la provincia se han sumado, los líderes del MIT y el MITA aseguran que la movilización no es obligatoria. Franklin Casicana, miembro del MIT, rechazó las acusaciones de que se esté obligando a los comuneros a unirse a las protestas y aseguró que están buscando crear conciencia en la población para que se sumen a la lucha “por dignidad”. La Asociación de Indígenas Evangélicos de Tungurahua (AIET), por su parte, se mantiene al margen de la decisión y está enfocada en la celebración de sus 50 años.