Las autoridades francesas iniciaron una investigación este martes 9 de septiembre tras la aparición de nueve cabezas de cerdo frente a mezquitas en París y sus suburbios, algunas marcadas con la palabra “Macron” en tinta azul, en un acto calificado como antimusulmán “abyecto” por el ministro del Interior, Bruno Retailleau. Con Francia albergando la mayor comunidad musulmana de Europa, el prefecto de policía, Laurent Nuñez, no descarta más hallazgos ni posibles “acciones de injerencia extranjera”, similares a casos previos de pintadas antisemitas.
El presidente Emmanuel Macron expresó su apoyo a la comunidad musulmana, mientras el rector de la Gran Mezquita de París, Chems-eddine Hafiz, denunció estos “actos islamófobos” como una escalada de odio antimusulmán, exacerbado desde el inicio de la guerra en Gaza en 2023. La fiscalía de París confirmó que las cabezas, símbolo impuro en el Islam, buscaban provocar y dividir, en un contexto de creciente islamofobia y antisemitismo reportado por la Agencia de Derechos Fundamentales de la UE.
Ciudadanos como Caroline, de 40 años, mostraron solidaridad dejando rosas blancas frente a una mezquita en Malakoff, afirmando que “la gente no debería esconder su fe”. Las autoridades refuerzan la vigilancia en lugares de culto, mientras la investigación busca esclarecer los motivos y responsables de este acto que ha conmocionado a la comunidad musulmana y generado repudio generalizado.