Israel e Irán se acusaron mutuamente el 24 de junio de 2025 de incumplir un alto el fuego anunciado por el presidente de EE. UU., Donald Trump, tras 12 días de conflicto que incluyeron bombardeos estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes. Trump, frustrado especialmente con Israel, insistió en que la tregua “está en vigor”.
Israel aceptó la propuesta estadounidense, afirmando haber neutralizado el programa nuclear iraní, mientras Irán celebró una “victoria” y aseguró haber forzado el cese unilateral. Sin embargo, Irán lanzó misiles contra Beerseva, matando a cuatro, y un ataque israelí en Guilán, Irán, dejó nueve muertos.
Trump anunció un alto el fuego “completo” desde las 04:00 GMT, con cese iraní primero y retirada israelí 12 horas después. A pesar de ello, Israel reportó dos misiles iraníes interceptados, mientras Teherán negó ataques posteriores. La Guardia Revolucionaria iraní afirmó haber dado una “lección” a Israel.
El conflicto, iniciado el 13 de junio con ataques israelíes contra Irán, ha dejado 610 muertos y 4.700 heridos en Irán, y 28 fallecidos en Israel. Catar medió para persuadir a Irán, mientras la ONU urge retomar negociaciones nucleares. Explosiones en Teherán y la muerte de un comandante y un científico iraní intensificaron la crisis.
Irán atacó la base estadounidense de Al Udeid en represalia por bombardeos a sus sitios nucleares, en una acción “proporcionada” según analistas. El OIEA aún no evalúa los daños, pero Irán asegura mantener reservas de uranio. La tregua pende de un hilo ante las continuas acusaciones.
