Este 1 de julio, Jefferson Pérez cumple un año más de vida y lo hace consolidado como una de las figuras más emblemáticas del deporte ecuatoriano, no solo por sus logros históricos como atleta, sino también por su actual rol dirigencial.
En la actualidad, Pérez se desempeña como presidente de la Federación Ecuatoriana de Atletismo y también como vicepresidente del Comité Olímpico Ecuatoriano, liderando procesos que buscan fortalecer el alto rendimiento en el país.
Nacido en Cuenca en 1974, Jefferson Pérez es el único deportista ecuatoriano que ha conquistado una medalla olímpica de oro, gesta que logró en Atlanta 1996 en los 20 kilómetros marcha. Años después, en Pekín 2008, volvería a subirse al podio con una medalla de plata en la misma distancia, ratificando su categoría entre los mejores marchistas del planeta.
Además de sus conquistas olímpicas, fue tres veces campeón mundial: en París 2003, Helsinki 2005 y Osaka 2007. Su consistencia y disciplina lo convirtieron en referencia mundial de la marcha atlética, siendo incluido en el Salón de la Fama de la IAAF (actual World Athletics) como reconocimiento a su trayectoria.
A lo largo de su carrera deportiva, Pérez acumuló más de 20 medallas internacionales y dejó una huella imborrable tanto dentro como fuera de las pistas. Hoy, desde el ámbito institucional, su objetivo es claro: impulsar a nuevas generaciones de atletas ecuatorianos para que el país vuelva a brillar en escenarios internacionales.
Su legado, que combina excelencia deportiva y compromiso con el desarrollo del deporte, sigue vigente. En su cumpleaños, el país celebra no solo a un campeón olímpico, sino a un referente de esfuerzo, integridad y liderazgo.
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