Jennifer Aniston, una de las actrices más queridas de Hollywood, ha abierto su corazón en una reciente entrevista en el podcast Armchair Expert, donde habló por primera vez sobre su decisión de no adoptar a pesar de enfrentar un largo y doloroso proceso de infertilidad. Durante años, la estrella de Friends ha sido objeto de especulaciones y críticas por no formar una familia tradicional, con muchos acusándola de priorizar su carrera sobre la maternidad. Ahora, Aniston ha decidido aclarar su postura con una sinceridad que ha conmovido a sus seguidores.
“Cuando la gente dice: ‘Pero puedes adoptar’, no quiero adoptar”, confesó la actriz. “Quiero mi propio ADN en una personita. Es la única manera, egoísta o no, sea lo que sea, lo he deseado”. Aniston explicó que siempre soñó con tener un hijo biológico, y aunque reconoce que su perspectiva puede sonar dura, la adopción nunca fue una opción real para ella. “Tal vez suene egoísta, pero para mí, tener un hijo implicaba que fuera parte de mí. Esa fue siempre mi expectativa”, añadió.
La actriz también compartió detalles sobre los tratamientos de fertilidad a los que se sometió, incluyendo la fecundación in vitro, y cómo enfrentó la devastadora noticia de que la maternidad no sería posible. “Llegó un momento en el que me dijeron que ya no había opción, y simplemente tuve que aceptarlo”, relató. Además, reveló que ella y su exesposo, Brad Pitt, también intentaron la fecundación in vitro durante su matrimonio, un detalle que había mantenido en privado hasta 2022.
Aniston no solo abordó su experiencia personal, sino también las duras críticas que ha enfrentado por parte de la prensa y el público. En una entrevista previa con la edición británica de Harper’s Bazaar, la actriz expresó su frustración por las narrativas que la tildaban de “egoísta” o “adicta al trabajo” por no haber tenido hijos. “No conocían mi historia, ni lo que había pasado durante los últimos 20 años para intentar formar una familia, porque no salgo a contarles mis problemas médicos”, afirmó, enfatizando que sus asuntos personales “no son asunto de nadie”.
Hoy, Jennifer Aniston asegura estar en paz con su realidad. “Ese barco ya zarpó”, dijo, mostrando una serenidad que ha resonado entre quienes admiran su fortaleza y autenticidad. Su historia no solo arroja luz sobre las presiones que enfrentan las mujeres en la industria del entretenimiento, sino que también destaca su valentía al compartir una experiencia tan íntima.
