Kim Kardashian abrió su corazón en el podcast Call Her Daddy de Alex Cooper, emitido el 15 de octubre, al hablar sobre su complicado matrimonio con Kanye West, al que describió como “tóxico”. La empresaria de 44 años, quien estuvo casada con el rapero desde 2014 hasta su divorcio en 2022, confesó que la relación estuvo marcada por inestabilidad emocional, financiera y personal, especialmente en los últimos años.

Kardashian relató cómo los episodios relacionados con el trastorno bipolar de West, diagnosticado en 2018, afectaron su vida familiar. “No sabía qué me iba a pasar al despertar, y era realmente inquietante”, admitió, recordando momentos como cuando West regaló cinco Lamborghinis a sus amigos durante un brote. A pesar de intentar apoyarlo tras su primera crisis psiquiátrica en 2016, Kardashian señaló que West “no estaba dispuesto a hacer cambios” que ella consideraba necesarios para su bienestar.

Madre de cuatro hijos con West —North (12), Saint (9), Chicago (7) y Psalm (6)—, Kardashian explicó que decidió priorizar su salud mental y la de sus hijos al solicitar el divorcio en 2021. “Es muy difícil seguir adelante con una relación tóxica, especialmente cuando tienes hijos”, confesó, aunque aseguró no arrepentirse de la relación que le dio “cuatro hermosos hijos”.

La empresaria también destacó su actual soltería, aunque su hija North insiste en que “necesita un novio” porque “se está haciendo mayor”. Mientras, Kardashian se mantiene ocupada con proyectos como la séptima temporada de The Kardashians, que se estrena el 23 de octubre, y su nueva serie All’s Fair, además del éxito de su marca Skims, que recientemente lanzó una controversial braga tanga que simula vello púbico y se agotó en horas.
