Kim Kardashian, la influyente empresaria y estrella mediática, ha vuelto a captar la atención mundial con el lanzamiento de una controvertida prenda de su marca de ropa interior SKIMS. La colección, bautizada como ‘Bush’, incluye una tanga micro-string de 32 dólares que incorpora un parche de vello púbico sintético en la parte frontal, diseñado para imitar el aspecto natural del cuerpo.
El anuncio, publicado este miércoles, ha generado una reacción inmediata y polarizada en las redes sociales. Mientras algunos usuarios aplauden la iniciativa como un paso hacia la normalización de la belleza sin depilar, otros la han criticado duramente, calificándola de innecesaria, antihigiénica o incluso una “provocación innecesaria”. Comentarios como “¿Quién pidió esto?” y “Es un statement, pero ¿era necesario?” han inundado plataformas como X.
Según reportes de medios como The Independent, la colección ‘Bush’ responde a una tendencia creciente de reivindicar la naturalidad y cuestionar los estándares de belleza que durante décadas promovieron la depilación total. SKIMS, conocida por su enfoque inclusivo en tallas y tonos de piel, parece buscar con esta línea desestigmatizar el vello púbico, un tema que para muchas personas sigue siendo tabú o fuente de inseguridades.
No es la primera vez que Kardashian utiliza su plataforma para desafiar normas sociales. Sin embargo, esta tanga ha llevado el debate a un nuevo nivel, dividiendo opiniones entre quienes ven en ella una declaración de empoderamiento y quienes consideran que la empresaria ha cruzado una línea. Por ahora, la polémica solo ha amplificado la visibilidad de SKIMS, consolidando su reputación como una marca que no teme generar conversación.
