La princesa Leonor, heredera al trono de España, continúa su exigente formación militar con una participación destacada en las maniobras DEVAS, un conjunto de ejercicios de supervivencia, evasión, resistencia ante captura y extracción (SERE de nivel B). Estas imágenes inéditas, difundidas por el Ejército del Aire y del Espacio, capturan a la joven de 19 años inmersa en escenarios hostiles, vestida con el uniforme de campaña y plenamente integrada con sus compañeros cadetes en la Academia General del Aire de San Javier.
El entrenamiento, que se extendió por tres jornadas intensas iniciadas el 26 de noviembre, puso a prueba la capacidad física y mental de los futuros oficiales. Bajo la supervisión del Departamento de Instrucción y Adiestramiento (I+A), los participantes aplicaron técnicas reales de operaciones militares, con el apoyo de unidades especializadas como el EZAPAC y el Ala 49, que desplegaron un helicóptero Sikorsky S-76 para simulaciones de extracción. Las fotografías muestran a Leonor atenta en una clase táctica frente a un ordenador, recibiendo indicaciones de un instructor y colaborando en equipo, proyectando una imagen de concentración y determinación que humaniza su rol como futura jefa de las Fuerzas Armadas.
Este hito llega tras un breve paréntesis en su rutina académica: la princesa asistió el 21 de noviembre a la ceremonia de imposición de la Insigne Orden del Toisón de Oro a la reina Sofía en el Palacio Real de Madrid, seguida de un almuerzo privado con la familia en el Palacio de El Pardo el 22 de noviembre. De regreso a San Javier, donde ingresó como alférez alumna de cuarto curso el 1 de septiembre de 2025, Leonor acumulará 100 jornadas en la Academia el próximo 9 de diciembre. Su etapa en el Ejército del Aire culmina un recorrido por los tres ejércitos españoles, emulando la trayectoria de su padre, el rey Felipe VI, y su abuelo, Juan Carlos I, ambos formados en este prestigioso centro murciano.
Las maniobras DEVAS no solo refuerzan habilidades técnicas como la aviación y los procedimientos de seguridad, sino que fomentan el liderazgo y la disciplina en entornos de alto riesgo, combinados con fases teóricas y vuelos iniciales con instructores. Fuentes del Ejército del Aire destacaron en redes sociales: “Estos ejercicios permiten poner en práctica los conocimientos del módulo SERE de nivel B, fortaleciendo la preparación en condiciones de operaciones militares reales”. La naturalidad con la que Leonor se integra –desde su primer día luciendo el mono de cadete hasta charlas informales con instructores en hangares– resalta su compromiso con la tradición castrense de la Casa Real, preparando el terreno para su futuro como soberana.
La difusión de estas imágenes ha generado un eco positivo en la opinión pública, con miles de interacciones en plataformas digitales que elogian su esfuerzo y cercanía. Mientras Leonor avanza hacia prácticas en solitario y evaluaciones finales, su presencia en San Javier no solo consolida su preparación profesional, sino que inspira a una nueva generación al demostrar que el deber y la vocación trascienden el linaje real. El Ejército del Aire, orgulloso de su alumna estrella, anticipa más hitos en esta fase aérea que moldeará a la futura reina como una líder integral y resiliente.
